Pide al tiempo que vuelva
Israel Pérez Rivera (Análisis Cinematográfico)
Xalapa, Ver., 2 de diciembre 2019; Actualmente el ser humano sueña con poder manipular el espacio-tiempo, ya que esto sería sin duda un gran avance para nuestra historia como civilización. Sin embargo para el séptimo arte esto no aplica pues películas con temática de viajes en el tiempo hay varias por citar algunas The Terminator (James Cameron, 1984) y Back to the Future (Robert Zemeckis, 1985). Claramente la idea de viajar en el tiempo se popularizó en la década de los ochentas.
La ciencia ficción o fantasía es una forma de llevar lo irreal al plano real ya como antes lo mencione viajar de un punto de la historia a otro aun no es posible; es por eso que la cinta Somewhere in Time o mejor conocida en México como “Pide al tiempo que vuelva” cae en el punto del realismo, puesto que con pocos efectos y trucos visuales nos hacen ver y sentir un viaje en el tiempo.
El filme Pide al tiempo que vuelva es un ejemplo de este tipo de cine que bajo la dirección del francés Jeannot Szwarc quien también dirigió Jaws 2(1978); nos muestra la combinación de romance y fantasía con destellos de drama. Lo cual hasta cierto punto es algo arriesgado la distancia que hay entre ambos géneros es muy densa sin embargo esto no resulto nada mal al contrario esto le dio el peso suficiente para que los códigos narrativos hicieran su trabajo y enganchen al espectador.
Al inicio podemos observar la escena donde el dramaturgo Richard Collier interpretado por el actor Christopher Reeve bueno antes de continuar hablando de los sucesos de Pide al tiempo que vuelva cabe mencionar que Reeve ya era conocido por la entrega del hombre de acero Superman (Richard Donner, 1978). No era de esperarse que después del estreno de Somewhere inTime también se estrenará la continuación de Superman pues el intérprete ya había conseguido una buena recepción del público.
No es solo por decir pues la actuación de Reeve es muy completa en cuestión de ponerle humanidad al personaje en turno, es por eso que Clark Kent luce tan bien en esa cinta cosa que se repite con Richard Collier
Tampoco hay que dejar por detrás la buena actuación de Jane Seymour como Ellise Mckenna una actriz de 1912. Su elegancia y belleza me hace pensar en el juego de los géneros sexuales mientras que Richard Collier es el típico galán aventado, Ellise Mckenna mantiene su estatus de mujer en peligro por el hecho que ella no sale de ser la mujer que mantiene modales y principios; lo cual es perfecto para el tiempo en que se desarrolla la trama de la película.
Bueno ahora así la trama del largometraje (duración 103 minutos) inicia en 1972 cuando Richard Collier celebra en una tarde noche la puesta de una de sus obras, a lo cual aparece una señora de edad avanzada que lo ha estado observando esta le entrega un reloj de bolsillo mencionando “vuelve conmigo”, hasta este punto todo parece una historia de suspenso. La anciana muere esa noche luego en la historia transcurren ocho años y es en 1980 cuando intrigado por aquel suceso Collier decide hospedarse de nuevo en Grand Hotel, es ahí donde observa una foto de la señora que le había dado el reloj.
Con esto crece la curiosidad del protagonista lo cual lo lleva a saber más de esta mujer descubriendo así que esa dama se dedicaba a la actuación y sobresalía en dicho medio. Continúan escenas que dejan ver hacia donde tira la historia, la aparición del botón Arthur y la ayuda del profesor da inicio a la Intriga de Predestinación de esta adaptación de la novela Bid Time Return escrita por Richard Matheson.
Tras asentar las bases de la trama en el primer cuarto de película, el protagonista a base de muchos intentos de auto hipnosis logra viajar al pasado para ser preciso a 1912. En esta época poco a poco se enamora de ella, no es para nada descabellado ya que Jane Seymour luce radiante en su papel, viven un par de eventualidades pero al final logran estar juntos.
Antes de finalizar y vivir felices por siempre tal cual cuento de princesas, la conexión de Richard con el futuro vuelve al tocar una moneda que se encontraba en su traje. A esto se le puede ser llamado tanto como paradoja o paradoja de gemelos suenan similar pero son dos cosas muy distintas, según los expertos.
La paradoja es un término utilizado por primera vez por el escritor francés René Barjavel quien redactaba ciencia ficción la obra que tuvo la dicha de esto fue Le voyageur imprudent (El viajero imprudente, 1943).
La segunda opción paradoja de gemelos es algo más complicada ya que es un ejercicio mental que se utiliza para analizar el tiempo, este tipo de paradoja fue propuesta por Albert Einstein cuando desarrollo la teoría de la relatividad espacial, donde menciona que la medida del tiempo no es absoluta o total, lo cual podemos asociar con el movimiento de una masa en el tiempo. Sea la primera o segunda opción el trabajo hecho en Pide al tiempo que vuelva cumple con objetivo de hacer sentir al espectador en otra época.
Ya en la última escena se puede ver otro fenómeno relacionado con la ciencia ficción pues al regresar a su tiempo correspondiente Collier enferma y entra en schok muy grave haciendo que muera y su alma se desprenda del cuerpo. Ante esto puede estar una vez más con su amada.